El crecimiento económico de la Zona Euro parece que está ganando tracción de la mano del aumento del consumo privado, algo que se llevaba tiempo esperando debido a las elevadas cantidades de ahorro acumuladas por los hogares. “De todas formas, siguen siendo tasas modestas en comparación con la expansión de Estados Unidos”, apunta Santiago Martínez, jefe de Análisis Económico y Financiero de Ibercaja, en el podcast que repasa los datos más destacados del informe de coyuntura económica de Ibercaja de enero.
Por el momento, se mantienen las divergencias entre zonas europeas que ya se habían detectado en meses anteriores: “Existen diferencias entre los países más orientados al sector servicios y los que tienen un mayor peso relativo de la industria y dependían más del comercio con Rusia, entre los que se encuentra Alemania”, explica Martínez.
En diciembre bajaron los tipos de intervención de los bancos centrales tanto en la Zona Euro como en Estados Unidos, pero los tipos a largo plazo han subido en las últimas semanas. Las perspectivas son de un aumento de los precios a medio y largo plazo superior a la de los ciclos anteriores. El jefe de Análisis Económico y Financiero de Ibercaja indica que “además, las necesidades de financiación del sector público siguen siendo elevadas, sobre todo en Estados Unidos, mientras se reduce la demanda proveniente de las políticas cuantitativas de las autoridades monetarias”.
En España se han publicado las cuentas no financieras de los sectores institucionales, que muestran cómo el país presenta una elevada capacidad de financiación a pesar de que el déficit público se mantiene en niveles superiores a los objetivos de Bruselas. Esta situación revela que se mantiene la elevada competitividad obtenida tras la gran recesión, tanto en la industria como, sobre todo, en el sector servicios.
A medio y largo plazo hay alguna amenaza si la situación no se revierte, como “el deterioro de los márgenes empresariales y la insuficiencia de la inversión acumulada en los últimos años”, subraya Martínez. A corto plazo el crecimiento seguirá impulsado por la saneada situación financiera de los hogares, que continúan beneficiándose de los aumentos tanto en la ocupación como en los salarios.