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Encuentros
Los aspectos legales y fiscales a la hora de realizar inversiones en empresas a menudo son olvidados o relegados a un segundo plano, pero pueden llegar a tener una importancia crucial. Por ello, Araban, la red de inversores y business angels de Aragón, organizó con la colaboración de Ibercaja una formación sobre todo lo que se debe tener en cuenta a la hora de invertir en empresas.
Luis Gosálbez, socio director de Metricson, firma legal especializada en innovación y fundador de Descorchify; y Emma Bover, asesora fiscal y financiera de grandes empresas y startups y socia directora de Kayroll.com, fueron los encargados de dar las claves fiscales y legales desde la perspectiva de los business angels.
Toño Ruiz, jefe de Estrategia Comercial de Banca de Empresas en Ibercaja Banco, abrió la jornada recordando que en Ibercaja “queremos crecer y evolucionar, y por ello, además de cuidar a los particulares cada vez ponemos más atención y ocupación en el ámbito de las empresas. A la hora de financiar una empresa buscamos más allá de su cuenta de resultados y miramos otros aspectos como su estructura. Gracias a redes como Araban podemos aprender mucho sobre inversión”.
Daniel Twal, presidente de Araban, explicó que esta red de inversores es una asociación sin ánimo de lucro cuya existencia tiene como fin contribuir a la generación de riqueza y futuro de Aragón a través de la co-inversión: “Araban es un impulso a la iniciativa emprendedora, la innovación, el desarrollo económico sostenible y la creación de empleo. Buscamos la rentabilidad de las inversiones, siempre desde la honestidad y la transparencia”.
Actualmente cuenta con unos 270 inversores registrados, con una capacidad máxima total de inversión de 9 millones de euros. Muchos son particulares (profesionales, directivos, empresarios), pero también hay family office, corporativos y fondos o vehículos de inversión. En cuanto a los sectores en los que más se invierte en Aragón destacan la tecnología, la industria, los materiales y la energía.
La actividad de Araban, tal y como apuntó Twal, se centra en:
Y entre los beneficios de ser socio de Araban su fundador destacó “el acceso a foros de inversión y formación exclusiva, la representatividad y reconocimiento en el ecosistema de inversión, la interacción y sinergias con otros socios y beneficios económicos, como descuentos en servicios y acceso preferencial a eventos organizados por entidades con las que Araban tenga convenios de colaboración”.
Luis Gosálbez hizo un repaso por cómo funciona un proceso de inversión y un pacto de socios, con las cláusulas que habría que incluir y cuáles sería conveniente evitar desde el punto de vista de los business angels. Entre los aspectos a tener en cuenta que Gosálbez destacó se encuentran los NDAs o los acuerdos de confidencialidad. “Como inversor hay que tener cuidado con ellos y hay que tener en cuenta que nadie va a tener interés en invertir en una idea hasta que no vea que funciona. Hay que convertir las ideas en realidad”, apuntó.
También hizo hincapié en la duración de las rondas de inversión: “si quieres invertir, no esperes 6 meses. Las buenas propuestas duran días, así que no dejes pasar el tiempo porque sí”. Y señaló en cuanto al smart money que “hay que tener cuidado con vender expectativas que luego no se pueden cumplir. Cuando se invierte en una empresa se invierte dinero, que vale igual que el de todos. Si luego quieres ayudar con otros aspectos o descuentos es un añadido”. Además, incidió en que a la hora de invertir no recomienda ni la liquidación preferente ni el venture debt.
“Los business angels coinvertimos, no lideramos. Normalmente invertimos en fases iniciales, donde la valoración es baja y maximizamos el retorno de nuestra inversión, aunque son las fases donde más riesgo hay. Además, tenemos conocimiento en industrias”, recalcó Gosálbez. Respecto a los modelos de sindicación, el experto subrayó que “hay muchas formas de invertir juntos, pero podemos destacar la sindicación por contrato, el contrato de cuenta en participación (participamos ambos de una misma cuenta) y por SPV (Sociedad de Propósito Especial)”.
En cuanto al pacto de socios, Gosálbez quiso destacar la importancia del drag along, conocido como “arrastre”. Es el mecanismo que tiene como finalidad proteger los intereses de los socios y/o accionistas mayoritarios. “Si queréis convertir vuestro dinero en más dinero lo que queremos es liquidez. Una condición muy importante en los acuerdos es que haya obligaciones, pero también penalizaciones ante los incumplimientos”.
Como síntesis, el experto recalcó que “los business angels no somos enemigos de los fundadores; somos socios y buscamos rentabilidad. No jugamos menos que ellos, buscamos su permanencia y que sigan trabajando para la empresa. Además, hay que tener en cuenta que nosotros no asumimos responsabilidades y que sabemos menos que los fundadores; nos falta información porque no estamos en su día a día”.
Emma Bover se centró en analizar la rentabilidad y la optimización fiscal. Hizo un repaso por los principales productos de la inversión directa e indirecta, que son las acciones (privadas y cotizadas), los bonos (cupón fijo, cero y flotante) y los derivados (futuros, opciones y warrants). Y recordó que se puede invertir “con el IRPF, con el que tributamos en la segunda parte de la renta, o con el impuesto sobre sociedades”. En una empresa se puede realizar una inversión a través de diferentes modelos. Bover incidió en la aportación de capital inicial o amplificación, la aportación de trabajo, los préstamos (participativos o convertibles) y los CCP (Contrato de Cuentas en Participación).
Sobre este último concepto la experta hizo hincapié, ya que es una forma de cooperación mercantil por la que una persona física o jurídica aporta bienes, derechos o capital con el objetivo de participar en el negocio o empresa de otro (gestor).
Además, Bover recordó a los asistentes a la formación aquello que tributa y lo que no. “Tributan los intereses, la remuneración del capital prestado; los dividendos, que es la parte del beneficio social que se reparte entre los socios y las plusvalías, que son los beneficios de la venta de participaciones u otro tipo de activos. Sin embargo, no tributan aspectos como los premios de lotería, las ayudas para la rehabilitación de viviendas, las indemnizaciones por responsabilidad civil o la indemnización laboral por despido o cede del trabajador”.
Bover explicó también que con efectos desde el 1 de enero de 2023 se mejoran las condiciones de la deducción en la cuota del IRPF para los inversores de empresas nuevas o de reciente creación. Por ello, repasó el concepto de “empresas emergentes”, donde se engloban:
La deducción por inversión en empresas de nueva o reciente creación se introduce en el IRPF con la finalidad de favorecer la captación por empresas, de nueva o reciente creación, de fondos propios procedentes de contribuyentes que, además del capital financiero, deseen aportar sus conocimientos empresariales o profesionales para el desarrollo de la sociedad en la que invierten (business angel), o también de aquellos contribuyentes que solo estén interesados en aportar capital (capital semilla).